Las cervecerías de Bielorrusia se enfrentan a una escasez de latas de bebidas debido a las sanciones impuestas al país, aliado cercano de Rusia. La crisis ha interrumpido la producción de las principales cervecerías, obligándolas a reducir sus operaciones o a buscar soluciones de envasado alternativas ante la escasez de suministros.
Las sanciones impuestas a Bielorrusia y a sus principales socios comerciales han interrumpido las cadenas de suministro tradicionales de materiales de embalaje metálicos. Los fabricantes locales de latas, que dependen de bobinas de acero y equipos de producción importados, ahora tienen dificultades para mantener la producción. Una importante cervecera informó una reducción del 30 % en la producción de cerveza en lata, y se espera que las existencias de latas vacías se agoten en cuestión de semanas. "Estamos operando con un calendario reducido", declaró un gerente de producción de la Cervecería Minsk, "y las botellas de plástico no pueden sustituir la durabilidad de las latas".
La escasez se ha extendido por toda la industria de bebidas bielorrusa, afectando no solo a la cerveza, sino también a los refrescos y las bebidas energéticas. Las pequeñas cervecerías artesanales son particularmente vulnerables, con recursos limitados para abastecerse de latas en el extranjero. Algunas han recurrido al embotellado o al envasado en barril, pero estas opciones conllevan mayores costos y desafíos logísticos. Mientras tanto, los minoristas reportan estantes vacíos en el pasillo de bebidas enlatadas, y los consumidores recurren cada vez más a productos importados.
Los expertos advierten que la crisis podría agravarse a medida que suben los precios mundiales de los metales y las rutas de transporte marítimo siguen limitadas. Las autoridades bielorrusas han insinuado iniciativas estatales para apoyar la producción local de latas, pero expertos del sector afirman que se necesitan soluciones a largo plazo, como acerías nacionales o alianzas comerciales regionales. Hasta entonces, las cerveceras se preparan para un verano de producción limitada, ya que la escasez de latas amenaza con desbordarse y convertirse en una crisis total en la cadena de suministro.